Calw es una pequeña y coqueta localidad de la Selva Negra de Alemania. Famoso por ser la ciudad natal del escritor y poeta Hermann Hesse y ser la puerta de entrada al Parque Natural del centro norte de la Selva Negra, Calw es uno de los pueblos que no te puedes perder en una ruta por esta zona de Alemania. No son muchas las cosas que ver en Calw, pero a veces menos es más y si algo nos gustó de Calw fue el pueblo en sí.
Nosotros tuvimos la suerte de visitarlo prácticamente solos y pudimos recorrer sus calles sin bullicios. Esto siempre es un punto positivo, aún así, Calw es un pueblo con un encanto especial y merece mucho la pena visitarlo.

Aeropuerto más cercano a Calw
La mejor forma de llegar a Calw es desde el Aeropuerto de Karlsruhe-Baden Baden. Es el aeropuerto que escogimos nosotros y el que os recomiendo para empezar vuestra ruta por la Selva Negra.
Está ubicado a las afueras de Baden-Baden, una de las ciudades principales de la Selva Negra. Desde el aeropuerto de Karlsruhe-Baden Baden hasta Calw hay unos 60 minutos en coche.
También hay otros dos aeropuertos que os pueden venir bien para viajar a la Selva Negra, aunque están más alejados de Calw:
- Aeropuerto de Friburgo: a dos horas en coche a Calw. Está algo alejado de Calw, pero si tenéis pensado hacer una ruta por la Selva Negra es muy buena opción.
- Aeropuerto de Estrasburgo (en Francia): a una hora y 50 minutos en coche. Como recomendación personal, a nosotros siempre nos gusta reservar el coche en el país que vamos a visitar y solo escogeríamos Estrasburgo si es la única opción o si tenéis pensado visitar también Alsacia.
Es cuestión de ver las conexiones con vuestro aeropuerto más cercano, pero para ser una zona con pocas ciudades grandes, la Selva Negra tiene buenas conexiones y varios aeropuertos donde elegir.
Dónde aparcar en Calw
El centro de Calw no destaca precisamente por tener muchos aparcamientos, pero os voy a enseñar uno totalmente gratuito y otros dos de pago.
Nosotros dejamos el coche en Parkplatz Stadtgarten. No hay muchas plazas, pero si tienes suerte y al llegar hay plazas libres, el aparcamiento está a 2 minutos andando de la plaza central de Calw. Y lo mejor, es gratuito.
Si no tenéis suerte, hay varios aparcamientos de pago en el centro. Uno techado en Parkhaus Calwer Markt y otro al aire libre en Parkplatz. Estos dos están también muy cerca del casco histórico y son una buena opción.
Dónde dormir en Calw
Si tenéis pensado alojaros en Calw, la oferta hotelera no es muy amplia, aunque siempre podéis echarle un vistazo y ver si hay suerte.
Nuestra idea al planear la ruta por la Selva negra era ir cambiando de hoteles, pero compramos los vuelos con muy poco tiempo y cuando fuimos a coger los hoteles estaba todo reservado o a unos precios altísimos.
Al final encontramos un hotel muy coqueto y familiar en Gutach y a día de hoy es uno de los hoteles donde nos hemos alojado que más nos ha gustado por el trato tan cercano.
Qué ver en Calw
Como he dicho al comienzo, Calw es un pueblo pequeño pero con mucho encanto y una arquitectura muy típica de la zona de la Selva Negra.

Si hay algo imprescindible que ver en Calw, es Calw. Os recomiendo pasear por su casco histórico y admirar las fachadas de sus edificios con entramados de madera.
No obstante, a pesar de ser un pueblo pequeño, hay varias cosas interesantes que ver en Calw.
Stadtgarden – El parque de la poesía
Nuestro punto de partida fue el Stadtgarden, traducido al español como el parque de la poesía.
Dejamos el coche en los aparcamientos de la zona alta y fuimos bajando hacia el casco histórico.

Lo curioso de este parque es que fue construido en 1871 con la ayuda de los ciudadanos del pueblo, siendo uno de los primeros senderos naturales de Calw.
En 2011 los alumnos del Hermann Hesse Gymnasium tuvieron la iniciativa de crear en él, el jardín de la literatura. A lo largo del camino que dibuja el parque, hay instaladas diferentes estelas de metal con poemas ordenados por las estaciones.
Georgenäum, un edificio con mucha historia
Justo a la salida (o entrada) del Parque de la Poesía se encuentra el Georgenäum, un edificio muy importante para la historia de Calw y sobre todo, para las mujeres.
El edificio lleva el nombre de sus fundadores, Emil von Georgii-Georgenau (cuya madre povenía de una familia importante de Calw) y Sophie Emilie Georgii.

Los fundadores querían mejorar la educación de los ciudadanos de Calw y fundaron el Georgenäum como centro educativo.
En su inauguración en 1870 abrió con una biblioteca con un stock inicial de 745 libros y una sala de conferencias abierta tanto a hombre como a mujeres, como se reflejaba en el contrato de fundación: “Hombres y mujeres tienen derecho a asistir a las conferencias a partir del decimocuarto año”

Con el paso del tiempo se añadió una escuela de dibujo y modelado, y poco después la escuela de trabajo de mujeres.
Hoy en día, el Georgenäum acoge la sede del coro de niños Aurelius, conocido mucho más allá de la ciudad de Calw.
Salzkasten – La caja de sal
Unos metros más adelante nos encontramos con El Salzkasten, o caja de sal en español.
Este es uno de los edificios más significativo que ver en Calw, construido en 1696. En este lugar se guardaba el “oro blanco”, la sal, que así la llamaban, para abastecer de sal a la población. En ese entonces el comercio de la sal era un privilegio del pueblo.

En este edificio se encontraba también la oficia del secretario del consejo. En 1722 a la casa se le llamó Salzhaus en relación a la función que desempeñaba la misma. Con el paso de los años esta casa sirvió también como oficina municipal y como escuela.
Markplatz, la plaza más bonita que ver en Calw
La Markplatz o Plaza del mercado es el centro de interés de Calw, donde se encuentra el antiguo ayuntamiento y la fuente más famosa de la ciudad, la fuente del León.

En 1692 un incendio redujo a escombros la mayor parte de los edificios del centro de Calw. Si embargo, poco después, las casas fueron restauradas, dando lugar al conjunto de casas con entramados de madera que pueden verse en la plaza del mercado y alrededores.
SABÍAS QUE…
Calw tiene más de 200 edificios de finales del siglo XVII protegidos.

Esta plaza recoge el verdadero encanto de la arquitectura típica de la Selva Negra. Una consecución (casi infinitas) de fachadas coloridas con entramado de madera.
Desde que viajamos por primera vez a Alemania quedamos enamorados de este estilo arquitectónico que se puede ver en casi todo el país y desde entonces soñamos con tener una casa así.

Ayuntamiento de Calw
Presidiendo la Marktplatz se encuentra el edificio del Ayuntamiento. Se construyó por primera vez en 1454, se destruyó en 1634 y se volvió a construir en 1672.
Las figuras que se pueden ver en su fachada principal simbolizan las tres tareas más importantes de la ciudad hacia sus ciudadanos. La figura del caballero representa la protección y justicia. El árbol simboliza el arraigo y florecimiento de la comunidad. Y la figura de la madre con sus hijos muestra el cuidado a los necesitados.

Junto al ayuntamiento está la Oficina de Turismo de Calw. Podéis aprovechar para entrar y coger algo de información o preguntar cualquier duda que tengáis.
Stadtkirche Peter und Paul
Otro edificio a tener en cuenta dentro de la propia Marktplatz es la Iglesia de Calw.
No tendréis que pararos a buscarla ni perder mucho tiempo. Su alta y puntiaguda torre destaca entre las fachadas coloridas y de entramado de madera que rodean por completo la plaza.

Los primeros informes que se tienen de esta iglesia datan de 1262, pero se sabe que ha sido destruida y reconstruida varias veces a lo largo de la historia.
Casa natal Hermann Hesse
En el número 6 de Marktplatz, se encuentra el edificio donde nació y vivió durante sus primeros años de vida el poeta y escritor Hermann Hesse.

Museo Hermann Hesse
En la parte más al norte de la Marktplatz se encuentra el Museo dedicado al Premio Nobel de Literatura Hermann Hesse, que nació en este pueblo el 2 de julio de 1877.
Situado en el histórico palacio municipal Haus Schüz, el museo tiene vistas a la casa natal del poeta.

En su interior se puede visitar una extensa colección del autor de lengua alemana más leído del siglo XX en el mundo.
INFORMACIÓN SOBRE EL MUSEO HERMANN HESSE:
Precio: Adultos 5€, estudiantes y jubilados 3€.
Horario: El museo Hermann Hesse de Calw se encuentra actualmente cerrado por reformas. Se espera que se abra al público en 2025.
En Montagnola (Suiza) lugar donde vivió durante muchos años y finalmente falleció en 1962, hay otro museo dedicado al célebre escritor.
El Largo
Desde la Plaza del Mercado se puede ver el Largo, la única torre que queda en pie de la antigua fortificación medieval.

Esta torre era la residencia del guarda mayor de la ciudad y también servía como cartel.
Puente de San Nicolás
Uno de los lugares imprescindibles que ver en Calw es el puente de San Nicolás, construido en piedra en el año 1400.
En el puente se encuentran dos monumentos muy importantes para la localidad de Calw.

Por un lado, encontramos la Capilla de San Nicolás, con dos figuras a izquierda y derecha que representan un comerciante de telas y un balsero, simbolizando los pilares económicos de Calw.
Por otro lado, en el Puente de San Nicolás se localiza la estatua de Hermann Hesse. Otro monumento que representa la importancia del escritor para Calw.

Restos de la antigua muralla
No es mucho el tramo que se conserva de la antigua muralla que rodeaba la ciudad, pero si que ha quedado un pequeño resto donde nos podemos hacer una idea de como era la muralla que defendía la ciudad.

Los restos se encuentran muy cerca de la Marktplatz, en uno de los callejones que hay cerca a la oficina de turismo.
El casco histórico de Calw es muy pequeño y se puede recorrer en pocos minutos, pero como he dicho al comienzo de la entrada, a nosotros lo que más nos gustó de esta localidad fue su conjunto.
Las casas con fachadas coloridas y entramado de madera, las calles empedradas y el verde de la naturaleza que siempre se deja ver en toda esta región, hacen de Calw un punto de parada obligatoria en una ruta por la Selva Negra.
Que ver cerca de Calw y la Selva Negra
Es muy probable que si habéis llegado hasta aquí es porque estéis en plena ruta por la selva Negra o planeando vuestro próximo viaje.
La Selva Negra de Alemania es una zona repleta de naturaleza con ciudades y pueblos preciosos.
Durante los cinco días que estuvimos de ruta por la Selva Negra nosotros visitamos:
- Sasbachwalden.
- Lago Mummelsee y ruinas de Allerheiligen.
- Friburgo de Brisgovia.
- Gengenbach.
- Cascadas y relojes de cuco de Triberg.
- Schiltach.
- Torre mirador de Bab Wildbad.
- Baden-Baden.
Además, muy cerca de la Selva Negra se encuentra la región francesa de Alsacia, que también pudimos recorrer durante 4 días en otro viaje anterior. Muchas personas deciden hacer las dos rutas de una vez, pero para ver ambas zonas hace falta unos diez o doce días y nosotros hicimos dos viajes por separados.